Están haciendo que los rumores se adueñen de la esperanza de los cirujas. El encuentro del domingo es esperado con gran expectativa por sus seguidores. Es la primera vez que, en este tramo de las definiciones, los santos dependen también de otro resultado.
En todos los partidos anteriores dependieron solo de ellos mismos.
Lástima que no supieron aprovecharlo. Con resultados, de sus rivales directos, favorables para las aspiraciones de seguir en primera , terminaron perdiendo sus encuentros. La única explicación, quizás sea las limitaciones de sus jugadores y la falta de resolución de su técnico.
Con este plantel, la posición que ocupa es la justa. Por todo lo demostrado a los largo de 37 partidos, seguir en primera sería demasiado premio. No le salieron las cosas bien, hubo equivocaciones infantiles, partidos planteados con ingenuidad, escasa vocación ofensiva, un arquero irregular, una defensa débil y una ofensiva sin aciertos.
El domingo se ve con más probabilidad que San Martín pierda su partido. Si continúa y debe jugar un desempate con Gimnasia de La Plata, también es durísimo. Solo un milagro futbolístico no sacaría a San Martín de la primera división del fútbol argentino.
Una pena para sus simpatizantes. Tanto esfuerzo para nada.
Daniel A. Villalba
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