La conducción de la Unión Obrera de la Construcción (UOCRA), que lidera Gerardo Martínez, rechazó las declaraciones respecto de la obra pública formuladas por el candidato a diputado nacional bonaerense por Unión-PRO, Francisco De Narváez, y sostuvo que "un ajuste en la actividad detendría el desarrollo económico del país".
Un comunicado de la organización sindical expresó que "el ajuste en la obra pública e infraestructura -tal como propuso De Narváez- detendría el desarrollo económico y la generación de empleo, representaría el regreso a las políticas neoliberales de los años '90 y, además, se contrapone a las estrategias instrumentadas en el mundo para superar la crisis" financiera.
"La UOCRA señala su rechazo a las expresiones mediáticas del candidato De Narváez, quien aseguró que entre sus planes prevé el 'ajuste y recorte en la ejecución de obras públicas', desconociendo la importancia vital y estratégica que el rubro tiene para el desarrollo económico sustentable, la multiplicación de la actividad económica y la generación de empleo", afirmó.
Martínez, también secretario de Relaciones Internacionales de la CGT que lidera el camionero Hugo Moyano, añadió que "las expresiones de De Narváez representan una clara coincidencia con los postulados que sustentaron el tristemente célebre Consenso de Washington, eslabón inicial de la aplicación de recetas neoliberales a ultranza que ofrecieron marco y constituyeron el embrión de la actual crisis económica que afronta el mundo".
"Esa crisis impacta de manera directa en la economía real y en el empleo en la mayoría de los países", puntualizó el sindicato.
Agregó que el candidato de Unión-Pro, con su propuesta de ajuste, desconoce que "las principales naciones se encaminan hacia la instrumentación de políticas activas, como las de la industria de la construcción, tendientes a la reactivación económica, la generación de empleo y el desarrollo de infraestructura".
"Ello es necesario para un país que aspire a insertarse de manera económica y comercial en el mundo y a superar las desigualdades sociales internas", puntualizó la organización.
Indicó también que "esas mismas políticas aplicadas hoy en el mundo fueron puestas en marcha en la Argentina a partir de 2003 por el gobierno nacional y se convirtieron en un verdadero motor de la recuperación económica, social y laboral del país".
"La industria de la construcción
en general y la obra pública en particular funcionan como un
verdadero ordenador social y, las políticas de ajuste
propuestas por De Narváez, evidencian que el
candidato
expresa la voz de las principales multinacionales".
En ese sentido, enfatizó que esas multinacionales "no se resignan a perder el privilegio de la concentración económica, aspiran a restituir un modelo económico de exclusión y pretenden que los trabajadores sean nuevamente la variable de ajuste".
"Ese sistema durante años estigmatizó a la obra pública bajo el erróneo concepto de gasto y no de inversión productiva, como quedó demostrado en los últimos tiempos", concluyó el gremio.(Télam).-
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