Lo aseguró el juez del Tribunal Oral Federal de Tucumán, Gabriel Casas, en diálogo con TucumánHoy. Este año se juzgará al represor por la causa de la “ex Jefatura”. Para el magistrado “los juzgamiento de los delitos de lesa humanidad son una bisagra en la historia Argentina y mundial”.
Por otro lado se refirió a las vacantes en los Tribunales orales federales y consideró que “una posible solución sería habilitar a los secretarios para que sean jueces interinos”.
En diálogo con TucumánHoy el juez del Tribunal Oral Federal de Tucumán, Gabriel Casas habló sobre el nuevo juicio a Bussi pronosticado para agosto de este año. Será la primera vez que se juzgue a los represores Antonio Domingo Bussi y Luciano Benjamín Menéndez por centro de detención, en este caso la ex Jefatura.
Además se refirió a la problemática actual que sufren los tribunales orales federales respecto a la designación de jueces subrogantes. Para el magistrado una solución sería habilitar a los secretarios para que sean jueces interinos.
¿Cuáles son las
características del nuevo juicio a Bussi por la causa La
Jefatura?
Una causa en la que se juzgará
por centro de detención será algo más compleja
porque tiene, por un lado, querellantes que el juicio anterior no
tenía, y por el otro más imputados. A los testigos y
peritos de todas las partes se les debe garantizar interrogatorios.
Entonces habrá que organizarlo bien para una adecuada
resolución.
De esta manera Casas, que el años pasado dictó la presión perpetua para Antonio Domingo Bussi y Menéndez por la causa Vargas Aignasse, aseguró que “los juzgamiento de los denominados internacionalmente delitos de lesa humanidad son una bisagra en la historia Argentina y mundial. Se da una evolución que comenzó, con las limitaciones y fallas, en el estatuto del tribunal de Núremberg (un conjunto de procesos jurisdiccionales emprendidos por iniciativa de las naciones aliadas vencedoras al final de la Segunda Guerra Mundial, en los que se determinaron y sancionaron las responsabilidades de dirigentes, funcionarios y colaboradores del régimen nazi en los diferentes crímenes y abusos cometidos a partir del 1 de septiembre de 1939)”.
Por otro, lado al igual que en la justicia provincial, los tribunales orales federales también tienen inconvenientes con la designación de jueces subrogantes.
Al respecto el juez considera que la situación “necesita rápida solución. La norma vigente prevee la formación por el Ejecutivo nacional de una lista de co-jueces abogados, pero esto no se efectivizó aunque la ley lleva más de un año.
Entonces las vacantes solamente se pueden cubrir con otros jueces que tengan acuerdo del senado, por lo tanto se produce un cuello de botella en todo el país. Por eso creo que una solución de urgencia sería habilitar a los secretarios para que puedan ser jueces interinos, ya que son personas bien formadas y con mucha experiencia.
Sebastián Ganzburg
sebaganzburg@gmail.com
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