04/05/2009 - En General

Paraguay llevará a arbitraje la disputa con el Brasil por Itaipú

El gobierno del Paraguay pretende llevar a un arbitraje internacional su disputa con el Brasil por el precio que recibe por la energía de la hidroeléctrica binacional de Itaipú si no alcanza un acuerdo sobre el tema con su socio, informó la prensa ayer, dio a conocer un cable de la agencia "The Associated Press" (AP).

El negociador paraguayo para Itaipú, Ricardo Canese, dijo al diario brasilero "Valor Económico" (de Sao Paulo) que su país llevará el diferendo a un arbitraje en caso de no llegar a un entendimiento en torno a la demanda paraguaya de aumentar los ingresos que recibe por la energía que vende al Brasil.

La advertencia se produjo antes de la visita del presidente paraguayo Fernando Armindo Lugo el jueves a Brasilia, donde se reunirá con su par brasilero Luiz Inácio Lula da Silva para discutir asuntos bilaterales, incluyendo la disputa por Itaipú.

Itaipú genera anualmente 75.000 gigavatios de electricidad, que reparte en partes iguales entre el Brasil y el Paraguay. Sin embargo, Paraguay vende el 90% de su cuota a su socio, aunque el precio que recibe por esa electricidad llega con el descuento de la deuda contraída en 1973 para la construcción de la planta.

Lugo ha reclamado que su país debe recibir el valor de mercado de la energía que Brasil compra de otras fuentes y asegura que una parte de la deuda es ilegítima, por lo que ha pretendido negociar nuevas condiciones para el pago de la energía.

Canese dijo al diario que su país no aceptará la propuesta brasilera de aumentar de 45 a 47 dólares estadounidenses el precio de la energía por megawatio-hora, por considerarla insuficiente.

“Para que la compensación sea justa, el precio debe ser el del mercado regulado de Brasil y el servicio de la deuda no puede incluir la parte ilegítima”, argumentó Canese.

Indicó que su país pretende también libertad para vender sus excedentes de Itaipú al mejor postor.

El tratado de Itaipú de 1973 establece que Paraguay solo puede vender sus excedentes a Brasil y fija las condiciones para el pago de la deuda por la construcción de la planta hasta 2023.

Canese se mostró confiado en alcanzar un acuerdo antes de final de este año, pero dejó claro que recurrirán a un arbitraje internacional si no hay un entendimiento, informó la "AP".