Fabricantes de baterías y empresas productoras de papel convinieron topes de venta para sus productos, en el marco de la tercera ronda de reuniones que llevan adelante sectores privados bajo el monitoreo de las autoridades de ambos países.
El resto de los sectores involucrados -muebles de madera, frenos y embragues, máquinas-herramienta, leche en polvo, harina de trigo y calzado-, avanzaron en las negociaciones.
Los fabricantes de baterías y las empresas productoras de papel de
Argentina y Brasil acordaron cupos de exportación para los productos
provenientes del vecino país, en el marco de la tercera ronda de
reuniones que llevan adelante sectores privados bajo el monitoreo de
autoridades de ambos países.
En el entendimiento, concretado
durante la reunión que entre el miércoles y la víspera se llevaron a
cabo en Buenos Aires, los fabricantes brasileños de baterías se
comprometieron a exportar al país un tope de 850.000 este año, mientras
que el acuerdo del sector papelero establece un cupo de exportación de
50 mil toneladas año con destino a la Argentina.
"El resto de
los sectores involucrados -muebles de madera, frenos y embragues,
máquinas-herramienta, leche en polvo, harina de trigo y calzado-,
avanzaron en las negociaciones, pero no concluyeron aún sus discusiones
y pactaron un nuevo encuentro en Brasil para mediados de mayo", precisó
hoy el Ministerio de Producción a través de un comunicado.
Las
conversaciones entre representantes del sector privado fueron acordadas
por ambos gobiernos en los primeros días de marzo, luego de la queja
formulada por los empresarios del vecino país contra la implementación
de licencias no automáticas de parte de Argentina para monitorear el
ingreso de productos de sectores industriales considerados "sensibles".
En esa oportunidad, en un encuentro se realizó en Buenos Aires
y fue encabezado por el secretario de Comercio Internacional, Alfredo
Chiaradía, y el vicecanciller brasileño, Samuel Pinheiro Guimaraes, las
autoridades del vecino país reconocieron que las medidas argentinas
estaban enmarcadas dentro de lo que estipula la OMC, mientras que los
funcionarios locales coincidieron en la necesidad de negociaciones
entre privados para arribar a una acuerdo.
La primera tanda
entre privados se llevó a cabo en Buenos Aires el 25 de marzo, mientras
que la segunda se concretó entre el 7 y 8 de abril pasado en San Pablo.
La tercera ronda -en la que se concretaron los primeros acuerdos- se
desarrollaron el miércoles y el jueves en la sede de la Cancillería
argentina.
"Los gobiernos estamos garantizando que los
sectores privados acuerden pautas de comercialización que sean
compatibles con el nivel actual del mercado interno y fundamentalmente
que nos permitan mantener el nivel de empleo local", dijo el
subsecretario de Política y Gestión Comercial del Ministerio de
Producción, Eduardo Bianchi, uno de los funcionarios que participaron
de las reuniones.
Bianchi dijo que las negociaciones entre las
empresas de ambos países de Máquinas-Herramienta y de Calzado "están
muy avanzadas".
En lo que respecta al sector lácteo, luego que
circularan versiones en torno a restricciones dispuestas por el
gobierno del vecino país a productos argentinos, las autoridades
brasileñas explicitaron "no hubo innovación en la política" destinadas
a las importaciones de este tipo, aunque reconocieron que "están
dispuestos a monitorear detenidamente el precio y la cantidad de las
exportaciones argentinas".
Según el parte de prensa
distribuido por Producción "en el sector lácteo los representantes
avanzaron en gestiones para llegar a un acuerdo" y detallaron que "las
negociaciones tocaron temas como el precio mínimo de exportación de
Argentina hacia Brasil".
En la cartera que conduce Débora
Giorgi recordaron que las negociaciones que se llevan adelante
actualmente "se desarrollan en el contexto del objetivo fijado por
ambos gobiernos de crear las mejores condiciones para enfrentar los
desequilibrios existentes en ciertos sectores del comercio bilateral y
los efectos negativos de la crisis económica internacional sobre la
actividad productiva y el empleo".
Si bien falta la firma
final de las partes y de las autoridades de ambos países, en el sector
baterías "quedó listo para formalizar un acuerdo por el cual Brasil se
comprometió a exportar hacia Argentina 850.000 unidades durante el año,
de las cuales 300.000 estarán destinadas a las terminales automotrices
y el resto llegará al mercado de reposición", precisó la cartera de
Producción.
En el sector papelero, por su parte, el
entendimiento fue refrendado durante la víspera en el Palacio San
Martín durante un encuentro del que tomaron parte el subsecretario de
Integración Económica y MERCOSUR, Eduardo Sigal; el subsecretario de
Política y Gestión Comercial, Eduardo Bianchi; el Embajador de Brasil,
Mauro Vieira.
Por el sector privado estamparon sus firmas la
titular de la Asociación Brasilera de Celulosa y Papel, Elizabeth De
Carbalhaes y el presidente y vice de la Asociación de Fabricantes de
Celulosa y Papel de Argentina, Osvaldo Vassallo y Federico Nicholson,
respectivamente.
El nuevo acuerdo entre las organizaciones
representativas del sector productor de celulosa y papel establece un
cupo de exportación de 50 mil toneladas por año que deberán cumplir los
brasileros.
"Este acuerdo relativo al comercio de papeles
"blancos" (de impresión y escritura) es una renovación del acuerdo
firmado originalmente por ambos sectores en el año 1999 y que ha tenido
excelentes resultados para el ordenamiento de los mercados de dichos
productos en nuestros países", precisaron las autoridades del
Ministerio de Producción.
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