La “Noche de los Lápices” encarna uno de los momentos más representativos dentro de la historia Argentina. Por aquellos años la represión impuesta por la dictadura argentina englobada en el plan del Proceso de Reorganización Nacional impulsó una serie de secuestros y torturas a estudiantes secundarios
Los hechos ocurridos en La Plata la noche del 16 de septiembre de 1976 dejaron sobrevivientes. Emilce Moler es una de los cuatro afortunados y durante su visita a la provincia contó sus vivencias.
Organizado por la Secretaria General mediante su comisión Especial para la Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, se realizó ayer una “Jornada por la Memoria, la Verdad y la Justicia”.
Con un anfiteatro repleto de jóvenes estudiantes, Moler expuso detenidamente su experiencia como militante estudiantil, víctima sobreviviente del secuestro y como investigadora científica comprometida con la educación pública y los derechos humanos. En el Aula Magna de la Facultad de Ciencias Económicas los estudiantes escucharon inmóviles los relatos de la doctora Moler, hoy profesora en Matemáticas, master en Epistemología e investigadora en la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Mar del Plata. “Nunca van a alcanzar las palabras y las decisiones para que se construya una idea abarcativa de lo que ocurrió el 24 de marzo del 76. La memoria se construye día a día y desde la verdad,” reflexionó la sobreviviente a la Noche de los Lápices para dar inicio a la charla. “Lo que se pretende transmitir es el relato de una realidad que fue compleja y traumática. Muchas veces desde los testimonios se ayuda a interpretar mejor la realidad y esa es mi colaboración con la UNT y la sociedad en general” agregó Moller.
De las actividades también participaron el rector de la casa de altos estudios, Juan Alberto Cerisola, el Secretario General de la UNT, José Hugo Saab y el titular de la Secretaría de Derechos Humanos de la provincia, Daniel Posse.
Tanto la universidad como el gobierno de la provincia coincidieron en la necesidad de acelerar los procesos de enjuiciamiento que pesan sobre los represores. De la misma manera solicitaron celeridad al Poder Judicial en este sentido “Los tres poderes del Estado estamos en deuda con los desaparecidos”, aseguró Daniel Posse. “Es la justicia quien tiene la palabra” agregó el funcionario.
Por su parte el secretario General de la UNT, José Hugo Saab destacó la presencia de los estudiantes durante toda la jornada y aprovechó para hacer un repaso por la situación de las universidades en aquel proceso histórico: “La universidad y sus miembros fueron uno de los sectores más castigados por la represión. Sufrimos secuestros y desapariciones de docentes y estudiantes y la censura de nuestros contenidos académicos” enfatizó.
Testimonio de vida
En compañía de las autoridades Emlice revivió aquella noche. “Tenía 17 años y cursaba quinto año del Bellas Artes cuando me secuestraron, en un operativo que incluyó a muchos más compañeros que los de esa noche y de los cuales sobrevivimos unos pocos” El 17 de septiembre de 1976, un grupo de encapuchados se la llevó de su casa : “Entraron gritando que eran del Ejército y que buscaban a una chica de Bellas Artes”.
Emilse fue torturada en el “Pozo de Arana”, dependencia de la policía provincial, donde estaban muchos de los secuestrados en esos operativos, entre ellos sus amigas
En todos los casos se esforzó por aclarar que la transmisión a los jóvenes requiere que no se hagan simplificaciones de la historia "ni cuentitos que no sirven para entender lo que pasó". “Debemos ayudar a los jóvenes a entender este presente” finalizó.
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