El abogado Alejandro María Macedo Rumi, defensor de un gendarme que esta siendo juzgado por la apropiación de un hijo de desaparecidos durante la dictadura, amenazó ayer con concurrir armado al tribunal aduciendo que su seguridad "no está garantizada".
"Podría venir con un arma porque no está garantizada mi seguridad personal", dijo el letrado que defiende al comandante mayor Víctor Rei, luego de tener un incidente con asistentes al juicio.
La insólita admisión fue realizada por el letrado ante el mismo Tribunal Oral Federal 6 cuando fue interrogado acerca de un episodio ocurrido minutos ante en los pasillos próximos a la sala de audiencias.
Según testigos, el abogado tuvo un entredicho con familiares de Liliana Clelia Fontana Deharbe, la madre desaparecida del bebé adoptado por Rei, que habían concurrido para acompañar a algunos testigos.
Macedo Rumi llamó de inmediato a la policía y pidió que se identificara a los presentes pero, según denunció ante el tribunal el abogado querellante Luciano Hassan, que representa a las Abuelas de Plaza de Mayo, también amenazó con asistir armado de ahora en adelante.
Luego de que el abogado admitiera sus dichos ante el tribunal, la presidente del TOF6 le advirtió: "usted sabe que está terminantemente prohibido hacerlo".
El ex gendarme Rei, preso desde hace cinco años en el Penal de Marcos Paz, afronta cargos por retención y ocultamiento de identidad del hijo de Liliana Fontana y Pedro Fabián Sandoval, secuestrados y desparecidos en julio de 1977, y de haber usado un certificado de nacimiento trucho.
El viernes último, al declarar ante el TOF6 dijo que había "adoptado un huérfano", pese a que en todas las indagatorias previas al juicio oral había insistido en que se trataba de su hijo biológico.
En línea con esa estrategia de defensa, el joven Alejandro, que ahora tiene 30 años y se enteró de su identidad en el 2006, puso en tela de juicio ante el mismo tribunal oral los análisis genéticos dispuestos por la justicia y se refirió a Rei como "mi padre".
Sin embargo, su medio hermano Fernando Sandoval, que declaró ayer en el juicio, reveló que Alejandro "sabe y está convencido que es hijo de mi papá y de Liliana Fontana".
Dijo que ambos habían entablado una relación "amistosa" y de respeto mutuo luego conocer los estudios realizados en el Banco Nacional de Dato Genéticos.
"En junio del 2008, nos encontramos a charlar y tomar una cerveza y le pregunte si creía que era mi hermano, al margen de lo que creyera de la prueba genética y me dijo que si, que el había hechos sus averiguaciones y sabía que era así", dijo.
El abogado Macedo Rumi es un especialista en este tipo de casos y el año pasado ya defendió al capitán Enrique Berthier, quien fue condenado a ocho años de prisión por la sustracción de la bebe Eugenia Sampayo Barragán, hija también de padres desaparecidos. (Télam).
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