Ayer se realizó la segunda marcha en reclamo de justicia para María Cecilia Reales, la pediatra de 39 años, fallecida hace dos semanas en un accidente de tránsito. El abogado de la familia Reales, Pablo Rivera, informó que pedió el cambio de tipificación jurídica del caso para que el menor pueda ser internado en el Instituto Roca. "De esa manera, el menor no recibiría un trato preferencial por su privilegiada situación económica y social", indicó el letrado.
Los colegas de la pediatra, suspendieron sus actividades en el hospital de niños y marcharon vestidos con sus ambos blancos.
Unos 70 colegas, familiares y amigos se dieron cita en el Hospital de Niños de la capital tucumana para solicitar actuaciones rápidas de la justicia y una condena para los culpables de la muerte de la doctora.
Munidos de pancartas y carteles que representaban el rostro de la galena, los manifestantes se congregaron en la puerta del nosocomio que da a calle Rondeau y, desde ahí, realizaron una vuelta a Plaza San Martín (frontera con el hospital) hasta retornar a su punto de partida.
Tras la silenciosa y blanca (todos los médicos usaron ese color en sus ambos) marcha, se ubicaron en las escalinatas principales y elevaron un canto de protesta que rezó simplemente: “justicia”.
La jefa del área de pediatría del Hospital de Niños, Dra. Noemí Díaz, en diálogo con la prensa, dijo que los colegas y familiares de Cecilia Reales continuarán realizando esta marcha “todos los martes, mientras el crimen permanezca impune”.
Además, destacó que es un error considerar este caso como un accidente. “Si se pudo evitar no hay accidente. Este fue un asesinato y son responsables tanto los chicos que conducían el auto, como sus padres”.
“Tampoco vamos a aceptar que por el hecho de pertenecer a una clase elevada económica y socialmente reciba un trato privilegiado”, anticipó.
Por otro lado, se hicieron presentes en la marcha, familiares de otras víctimas en casos similares al de la médica Reales.
Mercedes Rodríguez denunció que en febrero de 2004, reclamó por su hijo Leonardo Riveros fallecido en febrero de 2004; María Graciela Figueroa asistió por su nieta Noelia Vanesa Fernández y por su hija Noemí Fernández, muertas en octubre de 2008; y Elina Marchese, quien recordó que su madre María Silvia y su hermano Domingo expiraron en diciembre de 2008. Todos ellos, víctimas de accidentes de tránsito aun impunes.
Dentro de siete días, los médicos y familiares repetirán la medida de protesta para continuar exigiendo justicia para Cecilia Reales. Invitaron a la comunidad a sumarse a esta lucha.
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