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Hace un año en Tucumán

Las violaciones, en la provincia, a las reglas de tránsito son cada vez más frecuentes y con mayores lesiones a los involucrados. El desprecio por la vida ajena crece. Algunas de las reglas a cumplir por quiénes transitan por el Jardín de la República. Lea y entérese la cantidad de reglas que no se cumplen.

Nota publicada, en TucumánHoy.com,  el 11 de febrero de 2008.

En la provincia todos los días, cada vez con más frecuencia, se producen accidentes de tránsito. Los especialistas consideran que la mayoría son por fallas humanas. El incumplimiento abarca desde las normas para circular en vehículos o a pie.

Salir a la calle, caminando o en vehículos, es una lotería donde el premio es regresar ileso.

La insensibilidad, la violencia vial, el desprecio por la vida, propia y ajena, las malas condiciones de algunos vehículos y el desconocimiento de las normas aumentan la negra estadística de accidentes.

Tucumán no es ajeno a este flagelo. Los encargados de hacer cumplir las normas no poseen un consenso de respetabilidad por parte de la población. Son muchos los operativos anunciados y pocos los infractores sancionados.

La agresión vehicular o peatonal es una triste realidad. Las autoridades prometen mayores controles. No se nota. Sólo se ven unas que otras multas o secuestros de vehículos, y las infracciones muchas veces suceden delante de inspectores o policías.

Los transgresores no aceptan sanciones, reaccionan violentamente y agraden verbal y físicamente a quienes reclaman las actitudes de  estos potenciales “asesinos”.

La 24449 es la Ley Nacional de Tránsito. La misma contempla todas las alternativas para circular por rutas , calles y caminos.

Uno de las reglas menos respetadas en Tucumán tiene que ver con el uso de los semáforos.

Al respecto la ley dice que en las vías reguladas por semáforos:
A) Los vehículos deben:
1. Con luz verde a su frente, avanzar.
2. Con luz roja, detenerse antes de la línea marcada a tal efecto o de la senda peatonal, evitando luego cualquier movimiento.
3. Con luz amarilla, detenerse si se estima que no se alcanzará a transponer la encrucijada antes de la roja.
4. Con luz intermitente amarilla, que advierte la presencia de cruce riesgoso, efectuar el mismo con precaución.
5. Con luz intermitente roja, que advierte la presencia de cruce peligroso, detener la marcha y sólo reiniciarla cuando se observe que no existe riesgo alguno.
6. En un paso a nivel, el comienzo del descenso de la barrera equivale al significado de la luz amarilla del semáforo.

B) Los peatones deberán cruzar la calzada cuando:
1. Tengan a su frente semáforo peatonal con luz verde o blanca habilitante.
2. Sólo exista semáforo vehicular y el mismo de paso a los vehículos que circulan en su misma dirección.
3. No teniendo semáforo a la vista, el tránsito de la vía a cruzar esté detenido.
No deben cruzar con luz roja o amarilla a su frente.

C) No rigen las normas comunes sobre el paso de encrucijada.
D) La velocidad máxima permitida es la señalizada para la sucesión coordinada de luces verdes sobre la misma vía.
E) Debe permitirse finalizar el cruce que otro hace y no iniciar el propio ni con luz verde, si del otro lado de la encrucijada no hay espacio suficiente para sí.
F) En vías de doble mano no se debe girar a la izquierda salvo señal que lo permita.

La Ley también dice que hay una Garantía de tránsito: “Queda prohibida la retención o demora del conductor, de su vehículo, de la documentación de ambos y/o licencia habilitante por cualquier motivo, salvo los casos expresamente contemplados por esta ley u ordenados por juez competente”.

Si usted amigo conductor  peatón modificó, para bien,  sus actitudes cuando esta al volante es buen síntoma. Si leyó y sigue creyendo que es “vivo”, vamos mal. No se queje luego, no tiene permitido.

Daniel A. Villalba
villalbadaniel07@gmail.com