Ese país egistró la inflación más baja de los últimos 50 años, reflejo de la profunda recesión, mientras que el Citigroup anunció ayer pérdidas netas de 8.290 millones de dólares en el cuarto trimestre de 2008. A su vez, el Bank of America recibió nuevas ayudas del plan de rescate oficial por 20 mil millones de dólares
La economía estadounidense registró la inflación más baja de los últimos 50 años, reflejo de la profunda recesión que afecta al país, mientras que el Citigroup anunció hoy pérdidas netas de 8.290 millones de dólares en el cuarto trimestre de 2008, y el Bank of America recibió nuevas ayudas oficiales por 20 mil millones de dólares.
El Departamento de Trabajo de la Casa Blanca informó hoy que en
diciembre pasado se registró una tasa de inflación interanual del 0,1
por ciento, su nivel más bajo desde hace más de 50 años, según un
despacho de la agencia DPA.
Los precios al consumidor bajaron
en diciembre en un 0,7 por ciento con respecto al mes anterior. En
noviembre, la inflación mensual en Estados Unidos se había reducido en
un 1,7 por ciento.
Por otra parte, tras dar a conocer pérdidas
netas por 8.290 millones de dólares en el cuarto trimestre de 2008, el
Citigroup anunció hoy la venta de una parte de la entidad, mientras que
el Bank of America volvió a pedir ayudas estatales del gobierno por los
estragos de la crisis financiera.
Citigroup, que anotó números
rojos por quinto semestre consecutivo, anunció en Nueva York que sus
pérdidas ascendieron a un total de 8.290 millones de dólares el último
trimestre.
El que fuera el banco más grande de Estados Unidos
señaló no obstante en un comunicado que prosigue con su determinación
de ponerse "en forma", consignó la agencia DPA.
El banco se
dividirá en dos unidades operacionales, medida que se considera como
despedida definitiva de un grupo con actividades en todos los sectores
financieros.
Debido a los reveses de los últimos meses, la
entidad podría optar también por destituir a su presidente, Vikram
Pandit, según algunos medios estadounidenses.
Los nuevos
planes de Citigroup prevén la escisión de las partes problemáticas del
banco, que cuenta con activos tóxicos y diversas actividades
comerciales controvertidas, así como créditos a consumidores privados.
Por
otro lado, el núcleo de la entidad se centrará en las actividades
clásicas de gestión bancaria, con representaciones en más de 100
países.
El Bank of America, por su parte, que se había
convertido en la entidad financiera más grande del país tras el
descalabro de Citigroup, recibió por segunda vez ayudas públicas en
forma de inyecciones de capital y garantías por parte del gobierno de
Estados Unidos.
Sin contar las pérdidas derivadas de la compra
del banco de inversión Merrill Lynch, el Bank of America registró
durante el último trimestre de 2008 un saldo negativo por 2.400
millones de dólares.
Merril Lynch arrojó por su parte pérdidas por 15.400 millones de dólares.
Para
apuntalar la entidad, el Estado utilizó 20.000 millones de dólares del
paquete de rescate para el sector financiero y recibirá como
contrapatrida acciones preferentes de la entidad. El Bank of America,
por su parte, tendrá que pagar intereses con una tasa del ocho por
ciento.
El gobierno estadounidense avalará también activos
tóxicos por valor de 118.000 millones de dólares provenientes de
Merrill Lynch.
El Bank of America había comprado a mediados de
septiembre de 2008 el banco de inversión sacudido por las turbulencias
en el mercado, cuyo valor, entre tanto se ha desplomado a casi la mitad
de los 50.000 millones de dólares pagados inicialmente.
Según
el diario "The Wall Street Journal", Bank of America amenazó ahora con
cancelar la compra, que fue sellada a comienzos de año, si no recibía
nuevamente apoyo del Estado. Tanto el Citigroup como el Bank of America
están siendo fuertemente sacudidos por la crisis financiera.
Si
bien los resultados anuales arrojaron ganancias por 2.560 millones de
dólares, el Bank of America tendrá que agotar casi por completo sus
ingresos futuros y cancelar dividendos para poder pagar los intereses
de la ayuda del Estado.
En 2007, la entidad bancaria había alcanzado aún ganancias por 15.000 millones de dólares.
Para
el Citigroup, las pérdidas de este último trimestre son menores que las
anunciadas hace un año (9.800 millones de dólares), pero las cuentas
del grupo se han visto lastradas por amortizaciones de activos tóxicos
en más de 6.000 millones de dólares.
A ello se suma una elevada cifra de futuros impagos de créditos.
Las
ganancias en el último trimestre cayeron un 13 por ciento, a los 5.600
millones de dólares. En 2008 las pérdidas de Citigroup ascendieron a
18.700 millones de dólares, el peor año de la historia de esta entidad,
que surgió hace diez años de una megafusión.
En 2007 la empresa todavía anotó beneficios, de 3.600 millones de dólares.
Los
resultados del banco han sido peores de lo que los expertos esperaban.
Citigroup figura entre los grupos financieros más afectados por la
crisis económica.
El Estado ha apoyado la entidad con una
participación de 45.000 millones de dólares y además tendió un enorme
red con garantías de hasta 300.000 millones de dólares. (Telam)
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