Especialistas en nutrición destacan que en Argentina no está desarrollada la cultura del desayuno y que uno de los secretos para bajar de peso consiste en tomarse el tiempo necesario para desayunar bien e iniciar el día con energía, según un informe del Ministerio de Salud bonaerense.
"Además de darnos placer, la comida cumple la función de combustible que debe administrarse cuando se ha gastado energía y debe reponerla para encarar las actividades diarias", explicó la nutricionista María Laura Sansalone, del Programa Salud Activa de esa cartera.
Sansalone se autodefine detractora de las dietas estrictas, que considera generadoras de culpa e ineficaces, y sostuvo que lo conveniente es "educarse para saber elegir y, en el caso del desayuno, lo mejor es tomar una infusión con leche descremada o un yogurt, dado que los lácteos dan una mayor sensación de saciedad".
También dijo que "no es cierto que el pan tostado sea más saludable como algunos creen: el pan (sin tostar) se mastica mejor, tiene el mismo valor calórico y aporta hidratos de carbono, tan necesarios para tener energía al inicio del día".
Por el "hábito de comer demasiado de noche y poco durante el día la curva de alimentación es ascendente cuando debería ser descendente", advirtió.
Luego explicó que lo ideal es "más cantidad a la mañana y mediodía y, con el correr de las horas, porciones más chicas; sin embargo en Argentina no hay cultura del desayuno y eso juega en contra de la buena nutrición". (Télam)
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