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El Brasil registra flujo financiero negativo más alto desde enero de 1999

El Brasil registró un flujo financiero negativo en dólares estadounidenses en noviembre de u$s 7.159 millones, el más alto desde enero de 1999, informó el Banco Central do Brasil (BCB), en momentos en que la moneda local, el real, se deprecia presionada por la escasez de billete verde, informó un cable de la Agence France Press (AFP).

La cifra, para cuyo cálculo el BCB utiliza el saldo de balanza comercial y el saldo financiero (que entre otros incluye inversiones y compras de las empresas, y operaciones de títulos en el mercado de valores), supera con creces al número de octubre (- u$s 4.639 millones).

El saldo financiero negativo alcanzó los u$s 10.298 millones, compensado apenas por un saldo positivo de 3.139 millones en la balanza comercial, según el cuadro divulgado por el BC. El resultado de salida de dólares por este concepto es el peor desde enero de 1999, en medio de una crisis financiera global en la que muchos inversionistas requieren de dinero para cubrir necesidades en otros países.

El flujo financiero sigue siendo favorable para el año no obstante, con 5.390 millones de dólares de balance positivo. La escasez de dólares es uno de los factores que ha presionado al alza la cotización del dólar en Brasil, que el miércoles subió 3,23% para colocarse en 2,47 reales por billete verde, y este jueves se mostraba con igual tendencia a media jornada, llegando a la barra psicológica de 2,50.

Para el economista Miguel Silveiro de Oliveira, vicepresidente de la Asociación Nacional de Ejecutivos de Finanzas, Administración y Contabilidad, hay múltiples factores para explicar este escenario, que tiene bajo presión a la moneda local. Primero está “el hecho de que los inversionistas salieron a liquidar operaciones rentables en Brasil para cubrir perjuicios en otros mercados”, explicó en entrevista con la AFP.

Segundo, “las empresas (internacionales en Brasil) están enviando muchas ganancias para afuera”, sostuvo. “En la medida que sus matrices tienen problemas financieros, liquidan (...) para enviar ganancia para afuera”, enfatizó. Este especialista explicó asimismo que las propias empresas brasileras que tienen operaciones en el exterior, afectadas por la falta de liquidez en los mercados internacionales, tuvieron que utilizar recursos provenientes de sus actividades en Brasil para continuar con sus proyectos.

Silveiro de Oliveira también mencionó el valor de moneda refugio del dólar. Por más que el BCB inyecte dólares en el mercado, la preocupación generalizada por la situación económica lleva a las empresas a “comprar, comprar y comprar presionando el precio del dólar hacia arriba” para buscar protegerse, explicó. El analista previó asimismo que la volatilidad en el mercado cambiario local continúe por lo menos hasta el primer trimestre del año entrante, hasta que se conozcan los balances de las empresas brasileras y hasta que asuma el próximo presidente de Estados Unidos de América, Barack Hussein Obama, el 20 de enero, y anuncie planes para enfrentar la crisis, informó AFP.