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El crecimiento del Brasil puede ser perjudicado por la falta de ingenieros en el mercado

El número de ingenieros en el Brasil es insuficiente para el crecimiento previsto para el país. El alerta fue dado hoy por el presidente de la Federación Nacional de los Ingenieros (FNE), Murilo Pinheiro, durante el Congreso Mundial de Ingenieros, que se está realizado en Brasilia.

El presidente Lula participó del evento y asoció la carencia de esos profesionales a los 20 años de estancamiento económico en el Brasil.

“Si el número de plazas en el mercado de trabajo hoy es mayor que el número de ingenieros, mucho de eso se debe al estancamiento de nuestra economía durante las décadas de 80 y 90, lo que causó la caída en la demanda por esos profesionales y, consecuentemente, en el interés por la profesión”, dijo Lula.

Según el presidente, el Plan de Aceleración del Crecimiento (PAC) transformó el país en un cantero de obras, y eso representa un estímulo para la formación de nuevos ingenieros. “El estado necesita ser un inductor de la economía de este país. Acabó aquel tiempo en que, a causa de una crisis cualquiera, el estado pasaba a encogerse”, declaró.

También estuvo presente en el evento, el presidente de la Cámara de los Diputados, Arlindo Chinaglia (Partido de los Trabajadores), dijo que “las críticas que objetivaban quitar del estado la capacidad de invertir, perjudicaron la ingeniería nacional”.

Para el presidente de la FNE, es el estancamiento, hasta hoy, el problema que más perjudica la ingeniería. “El mercado está sólo calentando, y ya tenemos un déficit considerable de profesionales siendo formados”. Murilo Pinheiro informó que anualmente entran hacia el mercado 30.000 nuevos ingenieros, cuando el mínimo debería ser de 60.000. “Es poco, porque mientras mayor es el desarrollo y el crecimiento del país,  más ingenieros necesitará”.