Así lo graficó Héctor Diego Echavarría, Tesorero del Banco Nación Tucumán. También confirmó la escasez de metálico. Además comentó que no puede "comprender cómo las autoridades centrales pueden tener a una sucursal como Tucumán tan abandonada".
“Hace cuatro años que el Banco Central no nos abastece de monedas”, agregó.
El tesorero del Banco Nación, Héctor Diego Echavarría, confirmó que hay gran escasez de monedas en la Provincia. “Tenemos muy pocas monedas. Para colmo, como cabecera, tenemos que abastecer a las sucursales del interior (10 casas), a la subcabecera de Santiago del Estero (12 casas) y Santa María (Catamarca)", expresó.
El Banco Central de la República Argentina (BCRA) es el órgano rector y administrador del circulante metálico.
Al respecto, el tesorero señaló que “desde BCRA dicen -con buen criterio- que la plaza está cubierta, porque ellos expiden. Pero lo cierto es que las monedas no vuelven. Este banco llegó a trabajar con $ 4.200 de existencia de metálico”.
“El gran interrogante es ¿dónde están todas esas monedas? No se sabe quiénes son los que acopian, ni qué fines persiguen. El BC tiene que investigar cual es su destino final”, insistió Echevarría.
Hay una normativa del BC que dice que se debe entregar monedas. “A la vez, nosotros tenemos otra normativa interna que nos dice que el cambio de monedas es ineludible, en tanto y en cuanto no entorpezca el normal funcionamiento de la casa. Estas normas se contraponen”, concluyó el tesorero.
Ante esta situación, el Banco Nación Tucumán debió buscar monedas en su casa central (no en el BCRA). “Con ésta medida intentamos enfrentar fin de año. Nos proveyeron de $ 130.000 a principios de noviembre y sin ser dadivosos, posiblemente, lleguemos a fin de año. Pero esa cifra es realmente irrisoria para una plaza como Tucumán”, estimó el funcionario.
Dos versiones sobre la escasez de metálico
La escasez se debe a que el precio de los metales que componen las monedas (cobre y aluminio) es más alto que su valor nominal. Habría individuos que acopiarían monedas para fundirlas y vender los metales.
La falta se debe al acopio doméstico. “Eso es imposible. Nadie tiene $ 1.000 en monedas guardados en su casa. No habría espacio físico”, acotó Echevarría.
A título anecdótico, el tesorero contó: “ahora estamos dependiendo de una iglesia (no quiso decir cual) con la que nos abastecemos de $ 3000 aproximadamente por semana”.
Desde febrero de este año, el BCRA lanzó la línea 0800-999-MONEDA (6663) para denunciar la falta de monedas.
Juan Villarrubia
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