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La crisis internacional no afectará la producción de biodisel en la Argentina

Los pronósticos sobre el extraordinario crecimiento de esa industria, que será del 150 por ciento por segundo año consecutivo, se cumplirán a pesar de la retracción económica global, según evaluaron las autoridades de la Cámara Argentina de Energías Renovables (CADER).

Camilo José Alves I Télam

Este combustible se obtiene a partir de recursos renovables como aceites vegetales de soja, girasol, palma y también de grasas animales, a través de un proceso denominado transesterificación.

El presidente de la entidad, Carlos Saint James, manifestó en diálogo con Télam que la crisis financiera mundial "si bien es grave y aún no está claro que haya tocado fondo, tendrá un efecto relativo en nuestra industria".

La Argentina alcanzará este año una producción superior al diez por ciento del biodiesel del mundo, lo que la ubica como la tercera productora a nivel global -detrás de Estados Unidos y Alemania-, con una capacidad instalada de 1,4 millones de toneladas millones (1.600 millones de litros) y ventas estimadas en 1.500 millones de dólares, según indicó la Cámara.

Saint James explicó que si bien se ha producido una importante baja en los precios de los combustibles fósiles, lo que conllevaría en situaciones normales un vuelco de la demanda hacia ese sector, "también el precio de nuestra principal materia prima -el aceite de soja- ha descendido abruptamente, lo que brinda una oportunidad cierta de producir a precios muy competitivos".

El titular de la CADER calificó de "transitoria la situación económica que se está dando" y consideró que "una vez restablecida la normalidad, los precios tenderán al alza por la simple razón de que el mundo necesita energía, aun en períodos de crecimiento lento".

Ese análisis, formulado desde una perspectiva exportadora, se explica en el hecho de que actualmente la Argentina vende al exterior casi la totalidad de su producción de biodiésel "y no hay signos de que eso esté por cambiar", explicó Saint James.

En los últimos años este combustible ha registrado una creciente demanda en los mercados mundiales como consecuencia del alto precio del petróleo y numerosos países, entre ellos los de la Unión Europea, decidieron incluirlos gradualmente en la oferta de combustibles.

La CADER precisó que desde principio de año hasta fines de septiembre último, se embarcaron aproximadamente 750.000 toneladas del biodiésel en puertos argentinos, más unas 60.000 toneladas de glicerina, su principal subproducto.

Un estudio que será publicado a fin de año por esa entidad, bajo el título "El Estado de la industria argentina de industrias renovables: 2008", estima que la bonanza continuará en los años siguientes.

Para 2009 se estima una adición de quince plantas nuevas que permitirán aumentar la capacidad de producción a 982.000 toneladas, con lo que crecerá a un total de 2,4 millones de toneladas de biodiesel (2.600 millones de litros).

En 2010, cuando comenzará a regir en la Argentina el denominado "Cupo Nacional" que prevé la incorporación obligatoria del 5 por ciento de biodiesel al gasoil, la demanda potencial de ese combustible alcanzará a 700 millones de litros.