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AMPLIARLos evangélicos integrados para combatir el hambre y la pobreza en Brasil

Gobierno firma acuerdo con evangélicos para combatir el hambre y la pobreza

El gobierno federal utilizará la capilaridad de las iglesias evangélicas para llegar a poblaciones vulnerables y encaminarlas a programas sociales. El ministro de Desarrollo y Asistencia Social, Familia y Lucha contra el Hambre, Wellington Dias, firmó ayer lunes, en Río de Janeiro, un protocolo de intenciones con 27 segmentos de iglesias evangélicas en Brasil.

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El compromiso fue adquirido ante una audiencia de líderes evangélicos en la sede de la Asociación Brasileña de Prensa.

La intención es hacer de las iglesias evangélicas una puerta de entrada para las personas en situación de hambre, pobreza y desempleo a programas sociales, como Bolsa Família, prestaciones de seguridad social y Minha Casa, Minha Vida.

Los asistidos deberán ser parte del Registro Único (CadÚnico), una base de datos del gobierno federal para identificar familias de bajos ingresos que necesitan asistencia social e inclusión en programas de redistribución de ingresos.

Poblaciones

Para el ministro Wellington Dias, las iglesias evangélicas son una forma para que el gobierno llegue a las poblaciones más necesitadas.

"Reconocemos el importante trabajo que realizan las iglesias en las distintas denominaciones. Tienen presencia exactamente donde se encuentran porciones significativas de las personas más vulnerables. Tratan, en su vida diaria, con personas desempleadas, personas que tienen hambre, que quieren una oportunidad, son ancianos abandonados, población de la calle y niños abandonados”, enumeró.

“El gobierno tiene programas y queremos mejorar las condiciones para que esos programas también se puedan dar en conjunto con entidades vinculadas al pueblo evangélico”, dijo.

El ministro explicó que el acuerdo prevé que las iglesias capaciten a algunos miembros para que puedan servir como consejeros de personas con dificultades socioeconómicas. Por ejemplo, dirigir a las familias de bajos ingresos a los Centros de Referencia de Asistencia Social (Cras), donde se inscribirán en programas de transferencia de ingresos, como Bolsa Família y Benefício de Prestação Continuada (BPC), un tipo de jubilación para quienes no contribuyeron a INSS a lo largo de su vida.

El convenio firmado permite a las iglesias ser parte del Programa Nacional de Cocinas Solidarias. En el proyecto, las cocinas compran alimentos subsidiados a través del Programa de Adquisición de Alimentos, que compra productos de las familias rurales más pobres y de la propia región. Es una forma de ofrecer comidas populares e impulsar la economía local.

“Nos estamos preparando para tener seguridad alimentaria en Brasil”, dijo Dias.

Otra función del acuerdo con las iglesias es ofrecer asistencia para que los excluidos digitalmente puedan registrarse en programas sociales en línea.

La oferta de cursos de cualificación profesional es otro de los pilares del acuerdo firmado este lunes. El ministro destacó que se planea ofrecer cursos en áreas que requieren mano de obra. Citó el ejemplo del sector de la tecnología de la información.

“Sólo aquí en Río de Janeiro se estima que hay 20 mil vacantes. Por lo tanto, necesitamos proporcionar calificaciones para un área como ésta”.

El ministerio no informó el monto exacto que será transferido a “entidades que funcionan como entidad social”, como lo clasificó el ministro Wellington Dias. “Es un monto disponible para cada programa”. Según Dias, el control sobre el uso de los recursos será “a través de órganos de control, como en todos los ámbitos”.

Aunque el mecanismo de cooperación fue firmado con representaciones evangélicas, el director de la Red de Asistencia Social Privada del Sistema Único de Asistencia Social (Suas), Edgilson Tavares de Araujo, garantiza que no habrá discriminación contra quienes busquen programas gubernamentales.

“Es un programa de atención dirigido a personas en situación de vulnerabilidad social, independientemente de sus creencias. Todos y cada uno de los ciudadanos que necesiten el apoyo necesario para su protección social serán ciertamente bienvenidos”, dijo a Agência Brasil .

El ministro Welington Dias afirmó que coordina con el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) la creación de un fondo de garantía de crédito para facilitar el acceso de los pequeños empresarios a los préstamos bancarios. La propuesta sería similar a la que ya existe para los productores rurales.

La idea es que el gobierno actúe como garante de los empresarios que quieran abrir pequeñas empresas. “Al tener el fondo de garantía, el propio gobierno es el garante. Eso es lo que queremos hacer”, dijo, añadiendo que el presidente Luiz Inácio Lula da Silva recomendó que fuera algo con tarifas bajas y sin burocracia. 

Fuente: Agencia Brasil