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AMPLIAREl calor no deja de jugar en Ipanema - Tomaz Silva/Agência Brasil

Ola de calor golpea a 2.700 ciudades y se espera que dure hasta el viernes

La ola de calor que afecta principalmente a las regiones Sudeste y Centro-Oeste se prolongará hasta mañana viernes. El pronóstico es del Instituto Nacional de Meteorología (Inmet), organismo federal vinculado al Ministerio de Agricultura y Ganadería.

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En un boletín actualizado se enumeran 2.707 municipios afectados. Además de todas las ciudades ubicadas en el Centro-Oeste, Sudeste y el estado de Rondônia, la lista incluye aquellas ubicadas en el sur de Piauí, Maranhão, Tocantins, Pará y Amazonas, en el suroeste de Bahía y en el norte de Paraná.

En la clasificación del Inmet, las olas de calor se producen cuando la temperatura se mantiene, durante al menos cinco días, 5ºC por encima de la media esperada para el mes. La marca de los 40ºC ha sido superada en los últimos días en Río de Janeiro, Cuiabá y también en muchas ciudades del interior, como Corumbá y Água Clara, en Mato Grosso do Sul, São Romão y Coronel Pacheco, en Minas Gerais, Seropédica, en Río de Janeiro e Ibotirama, en Bahía.

Inmet registró varios récords el martes. Con una máxima de 39,2ºC, Goiânia tuvo la tarde más calurosa de su historia en el mes de noviembre. En Campos do Jordão, en el interior de São Paulo, la marca de 31ºC superó los 30,5ºC medidos en septiembre de 1961, hasta entonces considerada la temperatura más alta de la ciudad. El Distrito Federal también alcanzó un récord con 37,3ºC: fue el día más caluroso del año en lo que va del año.

Según el pronóstico del Inmet, se espera que los estados que enfrentan la ola de calor reciban lluvias intensas la próxima semana. En la Región Sudeste, el descenso de temperaturas del viernes (17) ya debería ir acompañado de precipitaciones.

Para el período del 21 al 29 de noviembre, se espera que algunas localidades reciban un gran volumen de lluvia, que podría superar los 40 milímetros, especialmente en Mato Grosso y Goiás, en el Distrito Federal, en Minas Gerais, en Río de Janeiro y en Espírito Santo. . En otras zonas, Inmet no descarta la posibilidad de lluvias.

En Río de Janeiro, locales y turistas acudieron a las playas este miércoles (15), fiesta de la proclamación de la República.

Efecto El Niño

La ola de calor que afecta a gran parte del país está fuertemente asociada al fenómeno de El Niño, señalan investigadores. El fenómeno se caracteriza por el debilitamiento de los vientos alisios (que soplan de este a oeste) y el calentamiento anormal de las aguas superficiales en la porción oriental de la región ecuatorial del Océano Pacífico. Los cambios en la interacción entre la superficie del océano y la atmósfera inferior tienen consecuencias para el tiempo y el clima en diferentes partes del planeta. Esto se debe a que la dinámica de circulación de las masas de aire adopta nuevos patrones de transporte de humedad, afectando la temperatura y la distribución de las precipitaciones.

"Estamos ante un El Niño fuerte", afirma el geógrafo Marcos Freitas, investigador de la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ), que llama la atención sobre las mediciones realizadas por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica, vinculada al gobierno de Estados Unidos. . Este organismo monitorea la temperatura del agua en la denominada Zona 3.4, ubicada en la porción ecuatorial central del Océano Pacífico. "Estamos llegando a casi 2ºC de anomalía. En general tenemos un Niño medio o débil cada dos años, que es cuando tenemos una anomalía de 1ºC, como máximo. Cuando supera 1ºC, lo consideramos un Niño fuerte. Esto cambia las masas de aire sobre nuestro continente". Según Freitas, lo que ocurre, entonces, es un bloqueo de la entrada de masas de humedad en una parte del Sudeste y un poco en el Centro-Oeste".

Según el investigador, la tendencia es que el verano sea muy caluroso. “Este El Niño no se va a disipar ahora”, añade. La Organización Meteorológica Mundial (OMM) estima que los efectos del fenómeno deberían sentirse al menos hasta abril del próximo año. Marcos Freitas señala que un El Niño fuerte ocurre más o menos cada siete años, pero destaca que el grado de intensidad ha ido aumentando debido al calentamiento global.

La evaluación del investigador de la UFRJ es corroborada por el coordinador de la Red Clima de la Universidad de Brasilia (UnB), Saulo Rodrigues Pereira Filho. Ve la posibilidad de nuevas olas de calor este verano. Saulo Rodrigues explica que, en Brasil, además de influir en la ola de calor en el Sudeste y Centro Oeste, el fenómeno provoca sequías en las regiones Norte y Nordeste, así como lluvias torrenciales y ciclones extratropicales en el Sur. 

 Fuente; Agencia Brasil