En un partido poco vistoso pero lleno de emociones Atlético e Instituto no se sacaron ventaja. A pesar de ser superior durante los 90 minutos el Decano cometió algunas distracciones que casi le cuesta una derrota. "Vitrola" Ghiso montó en cólera por la una polémica jugada.
Lo mejor estuvo en las tribunas.
Cordobeses y Locales se midieron sin sacarse diferencia en el tanteador. Fue en la tórrida tarde de Tucumán. Mientras los rayos del sol se filtraban por la perenne nube de humo que nos cubre y nos “protege” de sus nocivas radiaciones.
El equipo de Atlético dominó ampliamente el partido. Sin embargo la falta de coordinación de los conducidos por Rivoira hizo que ambos equipos terminaran igualados 2-2.
Instituto aprovechó una de las pocas oportunidades que tuvo, producto de una gran desinteligencia de la defensa decana para abrir el marcador.
Fue en el minuto 29 del primer tiempo. Por el sector izquierdo Martos perdió una bocha que intrascendentemente se iba por línea final. La tomó un delantero cordobés. Ingresó al área. “Satanás” Páez salió a marcarlo. No pudo rechazar el balón, y se quedó con la pierna del atacante. Bottoni cobró penal que Lázaro, el más claro dentro de la cancha, cambió por gol.
Tres minutos más tarde, Lázaro le puso un excelente e incisivo pase a Gagliardi, el mediocampista de Instituto, conectó el centro y amplió el margen de ventaja, enmudeciendo el estadio.
Antes de la finalización de la primera mitad, Cardoso recibió una segunda infantil amonestación (la primera, por disparar a la portería luego de que el árbitro detuvo una jugada. La otra, por tocar la pelota con la mano en la mitad de la cancha). La Gloria se quedó con uno menos y defendió con cinco.
En el segundo tiempo Atlético se paró mejor en el campo de juego. Se veía mayor decisión de ataque, aunque con poco estilo e ideas.
A los 25 minutos, cuando aparecían los primeros signos de resignación, y algún plateísta exclamaba: “así descendemos otra vez”, llegó el descuento. Pereyra abrió para Longo, éste desbordó, envió un centro preciso para que Gutiérrez la mande a guardar. Ghiso salió desesperado a reclamar que el esférico había salido en el momento del pase y el árbitro lo mandó a las duchas.
A partir del descuento y hasta el final del partido, los cordobeses se defendían con seis hombres.
El público enardecido y con las esperanzas renovadas, alentaba atronadoramente a sus jugadores para que vayan tras el empate que finalmente llegó luego de un curioso incidente en el cual un integrante del cuerpo técnico de Instituto quedó tendido sobre el césped, dentro de la cancha, en la esquina izquierda del frente de ataque decano.
El resultado final se hizo efectivo gracias a una asistencia enorme de Rodríguez (que reemplazó a Sarría en el inicio del segundo tiempo). En posición de enganche, el “Pulga” habilitó con un “riquelmiano” pase a Montiglio que decretó el empate.
Atlético deberá mejorar en el juego colectivo. No existe conexión entre sus líneas. El más claro en los Decanos fue Páez. El que mayor intervención tuvo en el partido, con cierto grado de individualismo, fue Pereyra. En Instituto, se destacó Lázaro.
Síntesis del partido
Juego Bonito: FF
Escenario: Estadio Monumental "José Fierro".
Arbitraje: Regular, a cargo de Leandro Bottoni.
Lo más importante, minuto a minuto:
29' PT – Penal de Páez a Gagliardi. Lázaro convierte de penal para Instituto.
33' PT – Gol de Gagliardi (Instituto).
40' PT – Expulsión de Cardozo (Instituto).
25' ST – Gol de Gutiérrez (Atlético).
40' ST – Gol de Montiglio (Atlético).
Juan Villarrubia
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