El poeta (1904-1973), ganador del Premio Nobel de Literatura en 1971 y uno de los más grandes autores líricos de la lengua española del siglo XX, murió el 23 de septiembre de 1973, doce días después del golpe de Estado que encabezó Augusto Pinochet para derrocar al gobierno del presidente Salvador Allende.
El 35 aniversario de la muerte del poeta Pablo Neruda pasó ayer prácticamente inadvertido en Chile, donde sólo la Fundación que lleva su nombre, el Partido Comunista y algún que otro columnista le han recordado.
El autor de Canto General,
Crepusculario y Versos del Capitán, entre otras muchas obras,
padecía de cáncer, pero su muerte fue acelerada por los
luctuosos acontecimientos de aquellos días.
El silencio
de este aniversario contrasta con la conmemoración, en 2004
del centenario de su nacimiento, cuando hubo múltiples
homenajes promovidos por el gobierno que prácticamente se
prolongaron durante todo el año, sin contar con las
actividades celebradas en el extranjero.
La Fundación
Pablo Neruda programó para ayer actividades culturales en las
tres casas-museo del poeta.
En Isla Negra, a 110 kilómetros
al suroeste de Santiago, donde yacen los restos del poeta y de su
compañera Matilde Urrutia, se inauguró la exposición
"Una mirada a Residencia en la Tierra", organizada por la
Dirección de Bibliotecas y Museos (DIBAM).
En "La
Chascona", la casa de Neruda en Santiago, se inauguró una
exposición basada en los poemas de "Estravagario",
otra obra nerudiana.
En "La Chascona" fue velado en
1973 el cadáver del poeta, en medio de la destrucción y
el saqueo cometidos por unos militares que horas antes allanaron la
casa, situada a los pies del cerro San Cristóbal y que incluso
desviaron las aguas de un canal para inundarla por completo.
Desde
ahí también partió el cortejo fúnebre de
Neruda, entre tanques y camiones militares erizados de fusiles, pero
que en el trayecto hacia el cementerio general de Santiago se nutrió
de una multitud que venció el miedo y convirtió el
funeral en la primera protesta contra la dictadura.
En "La
Sebastiana", la casa "de las fiestas", que Pablo
Neruda tenía en Valparaíso, se realizó un
recital poético.
El Partido Comunista, al que Neruda
perteneció, del que fue representante en el Senado y
precandidato presidencial en 1969 y al que también cantó
en sus versos, recordó el aniversario en un comunicado de once
líneas difundido por su comisión de
cultura.
"Venciendo la fuerza del tiempo, su obra
continúa vigente como una de las máximas exponentes de
nuestra identidad nacional y del valor del compromiso social y
político del creador con su pueblo", señala la
nota.
La figura de Neruda se proyecta, "junto a Violeta
(Parra), Salvador Allende, Víctor Jara y Gabriela Mistral,
hacia el bicentenario de nuestra república como expresión
de lo más alto y característico de nuestra
nacionalidad", destaca el comunicado.
Fuente: EFE
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