El gobierno chileno bloqueó ayer miércoles el pase de movilidad de unas 1,8 millones de personas por no haber dado la cuarta dosis de la vacuna contra el COVID-19 luego de seis meses desde la última aplicación.
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Los permisos de movilidad son necesarios para entrar a restaurantes, cines, cafés y otros lugares de esparcimiento.
Miles madrugaron en los últimos días para aplicar la cuarta dosis -o la segunda de refuerzo- y evitar que se bloquean sus pases.
La ministra de Salud, Begoña Yarza, descartó cualquier flexibilización en la medida restrictiva. “Las personas pueden ir a trabajar, pueden ir al colegio, pueden transitar en el espacio público. Lo que estamos regulando... es el espacio de ocio”, declaró.
Según cifras oficiales, casi 1,88 millones de chilenos no se han dado la cuarta dosis mientras que otros 890.000 están atrasados con la tercera. En tanto, 14 millones están al día. El país sudamericano está entre los que más vacunados tiene en el mundo.
Desde el inicio de la pandemia Chile ha registrado 3,7 millones de contagiados y 57.800 fallecidos.
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