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AMPLIAR Bolsonaro y cierta presión militar frente a las presidenciales (foto: ANSA)

Presión militar por cambios en el sistema electoral brasileño

La tensión entre el poder ejecutivo y el judicial sigue creciendo en Brasil, a menos de cinco meses de las elecciones presidenciales, luego de que el ministro de Defensa, general Paulo Sergio Nogueira de Oliveira, pidió al Tribunal Superior Electoral (TSE) hacer públicas las preguntas planteadas por las Fuerzas Armadas sobre las elecciones del 2 de octubre.

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Los militares han estado pidiendo cambios en el sistema electoral desde que fueron invitados a formar parte de la Comisión de Transparencia Electoral (CTE) el año pasado.

El pedido del ministro de Defensa se enmarca en la ofensiva del presidente de la República, Jair Bolsonaro, quien desde hace meses levanta sospechas sobre la confiabilidad de las papeletas electrónicas y defiende un conteo de votos paralelo, controlado por las Fuerzas Armadas.

El presidente del TSE, Edson Fachin -quien también es uno de los once magistrados del Supremo Tribunal Federal (STF)-, en tanto, autorizó la divulgación de los documentos que contienen las preguntas sobre el proceso electoral formuladas por los militares, informaron medios de prensa locales.

Según el diario Estado de Sao Paulo, en ocho meses las Fuerzas Armadas enviaron 88 preguntas al TSE que buscaban evidenciar supuestas vulnerabilidades en el proceso de votación y en el conteo electoral.

La participación de militares en la comisión creada por el TSE para aumentar la transparencia de las elecciones -requerida por el entonces presidente del TSE, Luis Roberto Barroso, en respuesta a las críticas de Bolsonaro- es vista hoy como un "error" ya que proporciona "munición" adicional al escepticismo del líder derechista sobre el funcionamiento del sistema electoral, señalan algunos observadores políticos.

La semana pasada se supo que el director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos comentó el año pasado a funcionarios brasileños de alto rango que el presidente Bolsonaro debería dejar de poner en duda el sistema de votación de su país antes de las elecciones de octubre.

Los comentarios del director de la CIA, William Burns, de los que no se había informado anteriormente, se produjeron en una reunión a puerta cerrada en julio, según dos personas familiarizadas con el asunto, que hablaron bajo condición de anonimato ante medios de prensa.

Burns fue, y sigue siendo, el funcionario estadounidense de más alto nivel que se reunió en Brasilia con el gobierno derechista de Bolsonaro desde la elección del presidente estadounidense Joe Biden.

Una tercera persona en Washington familiarizada con el asunto confirmó que una delegación encabezada por Burns había dicho a los principales asesores de Bolsonaro que el presidente debería dejar de socavar la confianza en el sistema de votación de Brasil.

Esa fuente no estaba segura de si el propio director de la CIA había expresado el mensaje.

La CIA no quiso hacer comentarios. El Gabinete de Seguridad Institucional (GSI) de Brasil, que es parte de la oficina del presidente y está dirigido por el asesor de seguridad nacional Augusto Heleno, dijo en un comunicado que la reunión de Burns había sido anunciada públicamente.

"Los asuntos tratados en las reuniones de inteligencia son confidenciales", dijo. "El GSI no recibe mensajes de ningún país del mundo, ni los transmite", añadió.

La prensa brasileña especula con que la administración de Joe Biden temen un comportamiento de Bolsonaro similar al de Donald Trump, si es que su mayor oponente, Lula da Silva, se impone en las elecciones presidenciales de octubre.