Con gol en contra de Martín Martos, en tiempo suplementario, Atlético Tucumán cayó contra Defensa y Justicia. Es la quinta derrota consecutiva del Decano como visitante. Los de Rivoira desaprovecharon algunas situaciones en los primeros minutos. Paez salió expulsado.
Atlético fue a empatar y se trajo una frustración.
La sensación que se vivió en la tarde de ayer cuando Halcones y Decanos se enfrentaron es que era un partido “ganable” para los tucumanos. En los primeros minutos de ambas partes el conjunto dirigido por el “Chulo” Rivoira fue más que su rival. Sin embargo no logró concretar las pocas oportunidades generadas. Los de Florencio Varela con escaso fútbol complicaron a la visita que a medida que transcurrían los minutos se fue metiendo más atrás.
Con semejante actitud el gol, lógicamente, debería llegar. Y así fue. En el minuto 46 luego de que Vega mandó un centro, la bocha le quedó a Martos y en vez de rechazarla se la metió al fondo del arco. Gol en contra, en tiempo de descuento y el esfuerzo de empatar un partido “ganable” quedó en la nada.
Pulga Rodríguez comenzó jugando como carrilero. Durante el tiempo que el técnico se lo permitió rindió, demostrando ser un excelente jugador. Junto con Erroz fueron los artífices del domino en el medio campo durante los primeros 20 minutos de la primera mitad.
Defensa recién apareció a los 24' cuando Paez sobre la línea evitó el gol de Sabadía. El mismo jugador casi anota en tres oportunidades más. El Halcón apareció porque el Decano se lo permitió replegándose atrás. La hinchada comenzó a alentar, mientras que los infiltrados decanos solo miraban atónitos, puesto que debían seguir en la clandestinidad.
El complemento fue un calco de los primeros 45. El encuentro era bastabte trabado, “chivo” como en la jerga futbolísitica se dice. La única chance de la visita estuvo promediando los 30 minutos cuando Montiglio envió un centro para que Gutiérrez, por solo 5 cm, no llegue a tocar el esférico e introducirla en el fondo del arco.
A esas alturas el local era amo y señor del partido. El conjunto tucumano totalmente replegado, especulando con el error defensivo de su rival, se salvó en un par de oportunidades producto de la mala definición de Bergese o alguna intervención aislada de Ischuk.
Sin duda lo peor de la jornada fue el codazo impresentable de “Satanás” Paez. A la finalización del partido comentó a la prensa que cuando fue a preguntarle al árbitro el porqué de la expulsión “me dijo que por un manotazo que le di al defensor. Pero nada que ver, solo fui a anticiparlo y él no lo entendió así”.
Lo cierto es que el central se perderá el enfrentamiento contra All Boys, en el Monumental. Con el ingreso de Arriola por Lujambio a los 22 minutos del complemento, las cartas estaban sobre la mesa. Atlético se cuidó demasiado con abundante gente en el medio campo. Sobre el final luego de un centro de Vega, Martos, al querer rechazar la bocha, le dio la victoria a Defensa. Y ya son 5 partidos consecutivos que los de 25 de mayo y Chile caen de manera consecutiva fuera de casa.
Sebastián Ganzburg
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